03 2022
Carta abierta sobre nuestra retirada del teach-in sobre Ucraina
Con gran tristeza, Daria Serenko (de resistencia feminista antiguerra) y yo hemos decidido no participar en la discusión organizada por Creative Time y Vera List Center "Teach-in on Ukraine for artists and activists" [“Sesión de enseñanza sobre Ucrania para artistas y activistas”[1]]. Queremos agradecer a Larissa Babji, Nikita Kadan y Mykola Ridnyi por su voluntad de participar en este evento junto con nosotros. Y muchas gracias a Corina Lucia Apostol por la invitación.
Después de difundirse la información sobre el evento en las redes sociales, Daria y yo recibimos un montón de mensajes de enfado. La acusación era que los expertos occidentales y activistas rusos no tendrían nada que enseñar sobre la guerra en Ucrania y que, en la situación actual, los rusos deberían ceder su lugar a ponentes ucranianos.
Por supuesto, ni Daria ni yo podemos enseñar a nadie nada sobre Ucrania; muy al contrario, fuimos invitados para hablar modestamente sobre la situación de las protestas contra la guerra dentro de Rusia y para mostrar solidaridad con la lucha ucraniana. Respetamos y entendemos totalmente la ira de cualquiera que esté exigiendo un boicot total e indiferenciado a las voces rusas en cualquier contexto. No hay matices en la guerra de clases, como solíamos decir.
Aquellos en Rusia que han resistido al régimen fascista local desde el principio y no han recibido nada de él salvo la represión, no necesitamos ser celebrados.
Es nuestro privilegio que nunca tuvimos que hablar desde la posición de nación, fuerza, militarización y lucha violenta. Este nunca ha sido nuestro lenguaje de resistencia. Siempre hemos hablado desde la posición de debilidad, vulnerabilidad y cuidado que hoy comparten todos los manifestantes en Rusia y Bielorrusia, frente a una legislación draconiana en tiempos de guerra. Continuaremos nuestras campañas anti-guerra en todas las formas posibles.
El creciente movimiento contra la guerra y el régimen fascista que tiene lugar hoy continúa una antigua lucha contra la autocracia y el colonialismo de Rusia. Estamos orgullosos de pertenecer a esta tradición que el régimen actual intenta silenciar y borrar.
Hay un viejo eslogan polaco: ¡Por nuestra libertad y por la vestra! (Za nasz ą i wasz ą wolno ść). Fue visto por primera vez en 1831 en una manifestación patriótica en Varsovia, celebrada para conmemorar a los decembristas rusos. En la Polonia partida por la fuerza, significaba que una victoria polaca también significaría libertad para las gentes de Rusia - compañeros presos en esa "prisión de los pueblos”. El lema lo dejaba claro: la lucha polaca por la autodeterminación y la soberanía no estaba dirigida hacia el pueblo ruso, sino al despotismo zarista. También era una llamada a la acción.
Para ser liberados de su servidumbre a manos arbitrarias de oligarcas y burócratas, los rusos tendrían que derrocar al régimen que se expande a otros países y los coloniza. Esta historia de lucha común contra la autocracia imperial rusa tiene un significado colosal para toda la cultura rusa "real", y no la que ahora estamos "aprendiendo" de Putin y sus compinches.
Hoy, lo que más necesitamos son debates basados en el respeto mutuo y la solidaridad. No podemos participar en discusiones donde todos los rusos y todo lo ruso se considere como una cultura de opresión y colonización. Respetamos esta opinión de los patriotas ucranianos en tiempos de guerra fascista, a la luz de todas las atrocidades del régimen ruso. Pero no podemos estar de acuerdo. Silenciar nuestra historia común y nuestro patrimonio emancipador es exactamente lo que Putin está haciendo. Por favor, no le ayuden.
Apoyamos vuestra lucha; es nuestra lucha también. Seguimos creyendo que esta guerra no es la guerra de Rusia, sino la de PutinZ y su régimen, y les estamos agradecidos por esta oportunidad de formular y defender esta posición. ¡Gloria a Ucrania! ¡gloria a los pueblos de Bielorrusia y Rusia que resisten, gloria a cualquiera que hace todo lo posible para detener la guerra y preocuparse por la vida, no la muerte!
[1] Esta es una traducción literal. El nombre del evento se traduciría mejor al español como “seminario”. Sin embargo, la palabra utilizada se basa en la palabra “enseñar” que, en la opinión de la traductora exacerba el problema de como se comprenden los objetivos del evento.